Los laminados son una gran opción para aquellos que buscan una alternativa económica y duradera al revestimiento de suelos. Sin embargo, a pesar de que los laminados son resistentes, pueden verse afectados por daños en el tiempo. Afortunadamente, reparar laminados dañados es un proceso relativamente sencillo y asequible que, en general, se puede hacer uno mismo.
En este artículo, como experto en carpintería, explicaré las diferentes formas en que se pueden reparar los laminados dañados y qué herramientas serán necesarias para iniciar el proceso. Además, también hablaré sobre cómo prevenir futuros daños en el laminado, para minimizar los costos de reparación y mantener el aspecto y la funcionalidad de su suelo.
Reparación de arañazos y pequeñas marcas
Los arañazos y pequeñas marcas en los laminados son algunos de los daños más comunes que se pueden reparar fácilmente. En la mayoría de los casos, el primer paso es limpiar el área afectada con un paño suave y humedecido para asegurarse de que no haya suciedad o polvo que haya quedado atrapado en el interior de la marca. Una vez que el área esté limpia, aplique un lápiz corrector del color del laminado. Si la empresa que fabricó sus laminados no ofrece un lápiz corrector, las tiendas de bricolaje y de mejoras para el hogar deben tener productos para laminados que se ajusten a su necesidad.
Simplemente aplique una pequeña cantidad de lápiz corrector sobre el área rayada y a continuación, asegúrese de que se seque completamente antes de volver a usar el suelo. Otra opción para eliminar las pequeñas marcas es aplicar una capa de cera líquida transparente o laca sobre la zona afectada, asegurándose de que la cera o la laca se integre bien con el color del laminado.
Reparación de quemaduras
Las quemaduras son un problema común en los laminados, especialmente en lugares donde se usan con frecuencia planchas o utensilios calientes. Para reparar una zona quemada, retire las fibras sobrantes con cuidado utilizando una lija fina. Asegúrese de lijar solamente el área afectada y no el resto del laminado, y evite lijar demasiado profundo para no dañar la capa superior de acabado del laminado.
Una vez que haya terminado de pulir la zona afectada, aplique una pequeña cantidad de cera líquida o laca transparente para proteger la zona y para asegurarse de que no se dañe futuramente. Si la zona quemada es demasiado grande, es probable que necesite reemplazar la tabla afectada.
Reparación de lamas o piezas de laminado sueltas
Si parte del laminado se ha soltado, es posible que necesite reemplazar la placa por completo. Para ello, retire la tabla afectada con cuidado utilizando un cincel y un martillo. Una vez que haya retirado la tabla, mida cuidadosamente la longitud y la anchura de la placa para asegurarse de que la nueva placa se ajuste perfectamente. A continuación, instale la nueva placa en el lugar de la anterior, utilizando adhesivos específicos para laminados que se venden en las tiendas de bricolaje y de mejoras para el hogar.
Reparación de laminados deformados
Un laminado deformado es a menudo provocado por la humedad no controlada o el agua estancada, y puede ser un desafío para reparar. En la mayoría de los casos, la única solución para un laminado deformado es reemplazar la placa afectada.
Para reemplazar la placa, siga los mismos pasos que en la reparación de lamas sueltas. En lugar de utilizar adhesivos para fijar la nueva placa, sin embargo, coloque la placa en su lugar y fíjela con el láser de calentamiento para que el laminado pueda adaptarse a la forma del suelo.
Cómo prevenir futuros daños en los laminados
La reparación de los laminados dañados puede ser un trabajo tedioso y agotador. A continuación, se presentan algunas maneras en que puede prevenir futuros daños en los laminados y reducir la necesidad de reparaciones costosas:
- Cubra los muebles con almohadillas protectoras: Los muebles pesados pueden rayar y dañar los laminados. Evite este problema cubriendo los pies de los muebles con almohadillas protectoras.
- Limpiar los derrames de inmediato: Los líquidos como el agua y los zumos pueden penetrar en las juntas entre las tablillas de laminado y causar deformaciones o hinchazones permanentes. Limpiar derrames tan pronto como sucedan.
- Mantenga los suelos secos: Es importante asegurarse de que los suelos estén secos en todo momento. Limpie cualquier derrame o acumulación de agua de inmediato para evitar cualquier daño adicional.
- Colocar tapetes de felpa: Colocar tapetes suaves en aquellas zonas donde haya más movimiento, como entrada, salón, etc. Esto ayudará a reducir la fricción en el laminado, que es una causa común de rayaduras.
En resumen, reparar laminados dañados no tiene por qué ser un proceso costoso y complicado. Al limpiar, pulir, aplicar un lápiz corrector, o reemplazar la pieza afectada, puede restaurar rápidamente su suelo laminado a su estado original. Tener precaución y medidas preventivas también ayudará a asegurar que sus laminados se mantengan limpios y sin daños por años venideros.